Las Hijas del Santísimo Sacramento de Burkina Faso celebraron con alegría la profesión perpetua de Sor Amélie Zougmore el sábado 14 de diciembre de 2024 en la parroquia de Saint Joseph Moukassa de Koudougou.
La celebración eucarística fue presidida por el obispo local, monseñor Joachim Ouédraogo, en presencia de sacerdotes, religiosas, amigos y miembros de la familia humana y espiritual de la hermana Amélie. Todos fuimos testigos de su compromiso ante Dios. El compromiso de la Hermana Amélie se basó en un diálogo entre ella y nuestra viceprovincial, la Hermana Silvie Roamba, delegada por la Superiora General, la Hermana Ann Almodovar, que reconoció el amor de Dios por ella: Así se compromete a vivir en comunidad fraterna viviendo el carisma de Marie Balavenne (recordando la fundación de la Congregación en 1706) viviendo los consejos evangélicos de pobreza, obediencia y castidad, amando y sirviendo a sus hermanas, a los pobres, a los niños…
En su exhortación, Monseñor Joachim tomó prestadas las palabras del Papa Francisco a las personas consagradas con motivo del Año de la Vida Consagrada (2015) para invitarnos a despertar al mundo, a dar testimonio de una forma diferente de actuar, vivir y servir. Amélie lleva varios nombres de pila, entre ellos «Sindykielgba», que significa «Callar y escuchar» en mooré, su lengua materna, y con ellos Monseñor la invitó a hacer de esto un proyecto de vida: saber callar para escuchar al Espíritu Santo, aprender a callar para escuchar a sus superiores, saber callar para escuchar a los pobres y saber escuchar y amar a sus hermanas a las que Dios la envía en misión comunitaria.
Al final de la misa, en sus palabras de agradecimiento, Sor Amélie expresó su gratitud a Dios, a su familia y a nuestra congregación de las Hijas del Espíritu Santo, que la acoge definitivamente en su seno y con cuyo apoyo cuenta humildemente para su crecimiento humano y espiritual. Después, los asistentes a la misa acudieron a nuestra comunidad para compartir una comida festiva con Sor Amélie, en un ambiente de convivencia y baile.
Que Dios, el Dueño de la mies, siga llamando y fortaleciendo los pasos de quienes se ofrecen a Él para el servicio de sus hermanos y hermanas.
Hermana Oho Lydie – Burkina Faso. Publicado el 17 de diciembre de 2024