Retiro anual para el personal docente

El sábado 11 de enero de 2025, las Escuelas Católicas de la diócesis de Oyo en Nigeria celebraron su retiro anual para todo el personal docente de todas las escuelas católicas de primaria y secundaria de la diócesis.

En este nuevo trimestre y año 2025, el retiro tuvo lugar en la zona de Ogbomoso, que incluye la Maryland Catholic Nursery and Primary School, atendida por las Hijas del Espíritu Santo, y la Maryland Catholic Grammar School. Asistieron setenta y siete (77) participantes.

Fue un día importante y solemne para todo el personal que se reunió en el lugar del retiro, Maryland Catholic Grammar School, para reflexionar sobre su servicio a las escuelas católicas y dedicar el nuevo trimestre y el año 2025. El retiro comenzó con la celebración de la Eucaristía hacia las 9.30 de la mañana, oficiada por el reverendo padre Francis Oladiipo, director de la escuela, y el reverendo padre Sylvester Ekuma, subdirector.
En su homilía, el padre Oladiipo recordó al personal que están llamados a servir a Dios de una manera única cerca de los niños confiados a la escuela.  Como dice la primera lectura, 1Juan 5:20, «Hijitos, guardaos de los ídolos».  Señaló que todos los cristianos deben librarse de los ídolos. En lo que respecta a los profesores, hay varias formas de ídolos que pueden obstaculizar una enseñanza eficaz y responsable: utilizar el teléfono móvil mientras se enseña, entorpecer la escucha de los alumnos, la vestimenta, el maquillaje, hablar a destiempo, etc.

La segunda parte del retiro se dedicó a una presentación sobre el tema «Las escuelas católicas: lugares de información, formación y transformación».  Esta presentación corrió a cargo de Hermana Priscilla Madumere, HES. Como parte de los objetivos de la educación, señaló que la educación católica pretende hacer de los alumnos agentes de cambio en el mundo. Al cultivar el sentido de la responsabilidad y el servicio, las escuelas católicas les capacitan para trabajar por el bien común, defender la dignidad humana y abogar por la paz y la justicia en sus comunidades y fuera de ellas.   También hizo hincapié en el papel de los profesores:
– Educadores de la persona
– Modelos de fe y virtud
– Facilitadores del crecimiento espiritual
– Promotores de la justicia social
– Mentores del pensamiento crítico y la moralidad
Añadió que los profesores, como actores clave en este proceso, influyen en el crecimiento intelectual, espiritual y emocional de los alumnos, garantizando que las escuelas católicas sigan siendo lugares de transformación significativa.
A continuación, todos los participantes se dividieron en diez grupos para debatir y poner de relieve los retos que podrían encontrar a la hora de informar, formar y transformar a los alumnos.

Cuando todos los grupos hubieron presentado sus resultados, Hermana Priscilla habló de posibles soluciones a los retos mencionados.
Animó a los profesores a imitar las virtudes de Jesús, modelo para todos los docentes, en términos de humildad, amor, paciencia, tolerancia y compasión. Esto les ayudará a alcanzar el objetivo de la educación católica: dar una formación integral para transformar a los niños en agentes útiles hoy y en los días venideros.

Hermana Patience EFFIONG, HES. Publicado el 15 de enero de 2024